Una Semana Santa extraordinaria en su desarrollo que deja, como líneas generales de trabajo de cara a la Pasión de 2018, la recuperación del silencio en la Plaza Mayor al paso de los cortejos y mejorar detalles de orden procesional. Ésta es la conclusión a la que llegan los informes procesionales elaborados por los nueve presidentes ejecutivos de las procesiones de la Semana Santa de Cuenca para este 2017, tal y como dieron a conocer ayer, como es habitual, en la primera Junta General celebrada por la Junta de Cofradías tras la Semana de Pasión.
La buena organización y coordinación entre representantes (en las procesiones en las que participa más de una hermandad), el aumento en la participación de hermanos (sobre todo, niños) en todas las procesiones y todas las hermandades, la calidad en la interpretación y buen comportamiento de las bandas de música de este año (con mención especial a la Banda de la JdC y a su director, Francisco Javier Poyatos, por su colaboración constante) así como el trabajo y buen entendimiento con los integrantes de la Comisión de Bandas, el buen funcionamiento del Plan de Seguridad (sobre todo en puntos especialmente conflictivos por la afluencia de público, como la Plaza Mayor) y el compromiso de la presidencia civil con los cortejos, han puesto las notas positivas al balance global de la Semana Santa de 2017.
En el extremo de las cuestiones a corregir y mejorar para 2018, las hermandades ponen en rojo en la agenda principalmente tres: la recuperación del silencio en la Plaza Mayor a la llegada y salida de los cortejos procesionales, ya que en este 2017 solo fue palpable el Lunes Santo y el Viernes Santo en la procesión del Santo Entierro; una nueva regulación de la presencia de medios de comunicación en el interior de los desfiles procesionales; y el establecimiento de medidas que permitan desterrar definitivamente las zapatillas de deporte entre nazarenos, banceros y portainsignias, toda vez que la uniformidad de todas las hermandades marca que se ha de desfilar con zapato negro.
El presidente de la Junta de Cofradías, Jorge Sánchez Albendea, mostró a la asamblea nazarena su compromiso para liderar los trabajos de mejora que permitirán engrandecer aún más los desfiles procesionales conservando su esencia.
Resumen de los informes procesionales
El presidente ejecutivo de la procesión del Hosanna, Diego Escudero, destaca en su informe “la gran cantidad de niños que desfilaban tras el guión”, así como el paso corto, tirada larga, baile y ritmo alegre de la Borriquilla y la Virgen de la Esperanza en la subida y que la bendición de palmas fue puntual. “La procesión llegó a los arcos del ayuntamiento a las 12:54 horas. Unas 12.000 personas esperaban a la procesión en la Plaza Mayor” explica Escudero en el informe, añadiendo que “un punto a mejorar es el poco silencio que cada año observamos en la Plaza. El paso por la misma fue fluido y a las 13:15 horas concluyó la procesión del Hosanna”. El informe deja constancia también del buen funcionamiento del Plan de Seguridad para los puntos más problemáticos (San Felipe y Plaza Mayor).
Por su parte, el presidente ejecutivo de la procesión del Santísimo Cristo de la Vera Cruz, Santiago Martínez, resalta en su informe la puntualidad del cortejo ya desde la salida, así como la presencia de “mucho público en silencio en la Plaza Mayor”, silencio y respeto que se repetiría en todo el recorrido. Destacable también el hecho de que los niños participaran por primera vez como nazarenos y que “han sabido guardar el protocolo, respeto y silencio que caracteriza esta procesión”. El informe procesional muestra la “satisfacción” de la hermandad “porque el desfile se desarrolló aceptablemente. El público en general respetó el silencio protocolario, los benjamines supieron estar a la altura y se cumplieron los horarios”.
Mariano López, representante del San Juan Bautista y presidente ejecutivo de la procesión de El Perdón, destaca en su informe la puntualidad en el inicio del cortejo y que la entrada de las hermandades se produjo con apenas 5 minutos de retraso sobre el horario previsto. “Las hermandades se incorporan al desfile sin cortes de ningún tipo” recalca, poniendo énfasis en “el silencio en la calle del Peso, tema pendiente y superado con nota este año”. Sobre el ligero retraso de la bajada, López explica en su informe que se debe “a la cantidad de hermanos que desfilaron”, pues “casi un 50% de los que están en las listas desfilaron con cada hermandad”. Por eso “en Calderón se incrementa el ritmo del cortejo, con el esfuerzo extra que supone para todos los banceros”. La procesión atraviesa “sin cortes Carretería, con mucho público en las aceras”. En su informe, el presidente ejecutivo habla de una procesión “de gran brillantez, de las mejores que yo recuerdo”.
Puntualidad también como nota destacada en la salida del Silencio, tal y como recoge Pablo López, representante de la V. H. del Prendimiento de Jesús y presidente ejecutivo de la procesión, en su informe procesional. “Se aceleró el ritmo de inicio y la Banda de la JdC formó en Diputación para agilizar la salida de los pasos de San Esteban (también se agilizaría la llegada a San Esteban con la ubicación de la Banda de la JdC de nuevo en la calle Aguirre y no en la propia San Esteban). Este año no ha habido problemas de cruce en la Puerta de Valencia, ni tampoco de fotógrafos dentro de la procesión” afirma, para resaltar el “gran número de hermanos en la subida” así como “el interés y eficacia del Ayuntamiento para resolver un problema con una alcantarilla”. La nota negativa en la subida la puso el “gran bullicio en la Plaza Mayor, que incluso impedía escuchar bien la música, por lo que es un problema en el que hay que trabajar”. El informe destaca la coordinación en San Felipe de hermandades y bandas para que se hiciera el silencio para los misereres, así como la “grandísima participación de hermanos en la bajada”. Para atestiguarlo, un dato: “Cuando la cabecera estaba en la Constitución, la Virgen de la Amargura aún en Puerta de San Juan”.
Sara Robles, presidenta de la Archicofradía de Paz y Caridad y también presidenta ejecutiva de la procesión de Paz y Caridad, recordaba al inicio de su informe que “este año solo se permitió la entrada al templo a banceros y portainsignias del Cristillo, Huerto y Amarrado, así como a tres hermanos por cada una del resto de hermandades, para agilizar la preparación de los enseres”. Esta medida permitió una mejor coordinación en la salida del cortejo, que fue puntual. La incorporación de las hermandades fue “progresiva y ágil”, de tal modo que a las 17:25 se incorporó la Soledad del Puente. “En Diputación, las hermandades más numerosas doblaron filas” detalló Robles, quien comentó además que “se hicieron pequeñas paradas de ajuste para adecuar el paso de la procesión a la retransmisión de TVE”. La subida “ha sido muy complicada, más que otros años” reconocía la presidenta ejecutiva, quien comentaba un ligero retraso en la entrada en la Plaza Mayor, respecto al horario de 2016. Destacable la coordinación para que se hiciera el silencio ante los misereres en San Felipe, así como que “el descenso fue agilizándose y sin problemas en ningún momento. Entró el Cristillo en torno a las 00:10 horas; la Soledad, a la 1:15 horas”. Robles enfatizó además el “gran empeño por parte de todos para agilizar la entrada”.
La puntualidad en la salida, el desarrollo del cortejo sin cortes y el extraordinario comportamiento de la turba, de principio a fin, son las líneas generales que hilvanan el informe procesional de Manuel Santacruz, presidente ejecutivo de la procesión Camino del Calvario y representante de Nuestro Padre Jesús Nazareno del Salvador. “En la Plaza de El Salvador funcionó el dispositivo de seguridad, subsanando problemas de años anteriores, así como propiciando una salida fluida y rápida”. Santacruz destaca la participación de muchos niños ya de madrugada, así como que “la turba colaboraba y el Jesús avanzaba sin problema”. El ascenso “fue ágil. A las 9:10 horas el Jesús entraba en la Plaza Mayor, abarrotada de público y con una turba ejemplar. En media hora entraron todos los pasos. La bajada fue más rápida que en años anteriores y en El Salvador, todo transcurrió sin incidentes; el dispositivo de seguridad volvió a funcionar”. Así las cosas, a las 11:57 horas entró el Jesús y a las 12:37 horas la Virgen. “Ha sido una procesión espectacular y ordenada” en la que el presidente ejecutivo resalta el “excelente comportamiento del Grupo Turbas. No recuerdo una procesión tan ejemplar de la turba, en la que incluso volvimos a escuchar el tambor”. El informe recoge también como “imprescindible” el “trabajar en los sonidos que caracterizan a esta procesión”. Concluye el mismo definiendo la procesión como una “inolvidable Camino del Calvario en total comunión”.
“A las 12:30 horas empieza a tocar la Banda de la JdC marcando el inicio del desfile, este año a la hora prevista”. Así comienza Rafael Castillejo, representante del Cristo de la Luz y presidente ejecutivo de la procesión de En el Calvario, su informe procesional de este año. Destaca la cantidad de público en la Puerta de Valencia para la salida de la Virgen de las Angustias, así como la fluidez en la subida pese a un pequeño incidente de La Lanzada. “A las 14:10, con la procesión completa, empieza el ascenso en la Plaza Mayor. Encontramos aceras más pobladas en el ascenso tanto en Andrés de Cabrera como en Alfonso VIII” asevera en su informe, situación que volvería a vivirse en toda la bajada, en una procesión con más público que en años anteriores. “A las 15:30 la Exaltación llegaba a borriquetas y a las 16:25 se inicia el descenso” explica el presidente ejecutivo, quien destaca asimismo el “gran número de nazarenos y las pobladas filas infantiles en toda la bajada”. El de este año “ha sido un gran desfile, tanto en participación de hermanos como en seriedad y buen desfile. Hemos alcanzado un nivel organizativo bastante bueno” afirmaba Castillejo, quien concluía con una petición al Ayuntamiento: “Que se retire el mobiliario urbano de Carretería para que sea más brillante el paso de las procesiones”.
Pedro Polo, representante de la Congregación y presidente ejecutivo del Santo Entierro, destaca en su informe la buena coordinación ya desde antes de la salida. “A las 20:55 llega a una Plaza Mayor a rebosar y en silencio total la Banda de la JdC. Las puertas se abren puntuales a las 21 horas. Se incorporan 28 cabeceras de hermandades y unos 150 hermanos de tulipa de todas ellas. Este año, como novedad, los congregantes iban junto a la Virgen de la Soledad y de la Cruz. Numeroso público en silencio en las aceras durante una bajada sin incidentes” destaca el presidente ejecutivo, quien sin embargo sí tiene que dar cuenta de un problema en la calle del Agua, pues en este punto “se engancha con unos cables casi invisibles la Cruz Desnuda, lo que provocó la rotura de una de las lanzas por este hecho”. A las 00:15 finaliza la procesión, tras un desarrollo en consonancia con la brillantez del resto de la Semana Santa.
Alfredo López, presidente ejecutivo de El Encuentro, comenzaba su informe con una reseña de la eucaristía previa a la procesión, celebración en la que “cada año es mayor la participación de hermanos y nazarenos”. López detalla que “se abren las puertas de San Andrés a las 10 horas, puntual” y destaca la “coordinación en ambos pasos, para llegar al Encuentro al mismo tiempo” así como “la cantidad de público en la Constitución” y que el Encuentro se produjo puntual. “A las 13:20 horas finaliza el cortejo. Se agotaron los cetros de adulto y la participación fue una de las más altas de los últimos años”. Solo hubo que lamentar dos pequeños incidentes que no empañaron, sin embargo, el buen transcurrir de la procesión: uno por un cable en Los Tintes y otro, la retirada de un bancero por golpe de calor en Carretería.
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